Breguet acogió cerca de doscientos invitados VIP en Múnich, en un ambiente armonizado por las teclas de un piano y la voz cautivadora de una cantante de soul. En colaboración con su distribuidor alemán Wempe, Breguet enfatizó el prestigio de la relojería en una exquisita velada. Los asistentes quedaron cautivados por el arte del guilloché, la quintaesencia exquisita de Breguet, y su destreza intrínseca. Los invitados, acompañados por un artesano especializado, tuvieron la ocasión de probar la delicada técnica de grabado, incorporada en las esferas de los relojes en 1786 por Abraham-Louis Breguet. También quedaron encantados con las creaciones más recientes de la Manufactura, desveladas en Baselworld 2018.
